Qué duda cabe, que hemos estado viviendo en la era de la ambigüedad desde hace ya un buen tiempo a esta parte. La pandemia simplemente aceleró las tendencias existentes y magnificó nuestra atención sobre los desarrollos que han estado surgiendo durante años.
Lo que parece ser un camino muy obvio hoy, es que las compañías deberían ofrecer apoyo personalizado para los empleados en función de su personalidad y situación de vida, fomentando una cultura de elección genuina, así como tener conversaciones abiertas y honestas para darles claridad y dirección. Esto asegurará que ningún empleado se quede atrás en la era de la ambigüedad.
La educación financiera es cada vez más esperada por los empleados y un pilar fundamental en cualquier estrategia de bienestar. Existe un impacto devastador entre los problemas financieros y la inseguridad en el bienestar de los trabajadores y, a la inversa, como la educación accesible puede mejorar drásticamente su confianza financiera.
Otro de los aspectos financieros, que indudablemente concitará el foco de trabajadores y compañías en su propuesta de valor, estará radicada en una propuesta en torno a pensiones. Más allá del análisis de porqué hemos llegado a este punto y de nuestras propias opiniones respecto de las causas de este problema, la impresionante liquidez incorporada al sistema financiero durante el último año (del orden de USD 50 millones), junto al retiro gradual de apoyos estatales, impactará muy fuertemente la situación de gran parte de los hogares de trabajadores, y motivará una genuina y creciente preocupación acerca de su bienestar financiero futuro, y muy especialmente, de cómo vivirán en su condición de retiro.
No hay soluciones sencillas y rápidas en esta era de la ambigüedad. Pero ahora más que nunca, existe una necesidad fundamental de que los empleadores brinden apoyo personalizado a los empleados para garantizar que puedan prosperar genuinamente en la era de la ambigüedad.
Para hacerlo, Aviva Life & Pensions UK Limited, ha presentado una serie de recomendaciones para que los empleadores las consideren:
1. Personalización del bienestar y el cambio cultural de arriba hacia abajo.
Comprender la necesidad de un enfoque personalizado para el bienestar de los empleados es clave.
Pero también es más fácil decirlo que hacerlo. Los empleadores y los gerentes pueden poner en marcha un soporte personalizado personalizando sus conversaciones con los empleados y utilizando la discusión para crear un paquete de apoyo para el bienestar a medida que se adapta mejor a las mentalidades y patrones de comportamiento individuales.
2. Hacer de la educación financiera algo personal.
La educación financiera en el lugar de trabajo no es nada nuevo, pero ahora hay un claro apetito por parte de los empleados por el apoyo individualizado. Proporcionar información en fragmentos accesibles y manejables a través de una variedad de canales y crear un espacio seguro donde se pueda discutir incluso el apoyo más básico, son los primeros pasos importantes hacia un enfoque más personalizado que garantice que todos, incluso los de difícil acceso, obtengan la información necesaria. apoyo que necesitan.
3. Apoyando las pensiones.
Un compromiso con un nivel mínimo de pensión daría a los empleados la confianza de que trabajan para un empleador que les ayudará a proporcionar su bienestar futuro, así como sus necesidades inmediatas.
Diferentes personalidades.
Existe la creencia generalizada de que las personas son resilientes o no lo son; sin embargo, esta creencia no es tan clara. Una investigación de AVIVA en UK arrojó que el tipo de personalidad tiene una gran influencia en el comportamiento, la mentalidad y los resultados personales. Los empleados que se las arreglan mejor en términos de su bienestar financiero y mental y que experimentan una mayor satisfacción en el trabajo, tienden naturalmente a ser más resilientes y optimistas.
Aquellos con menor resiliencia emocional experimentan regularmente emociones negativas, poca confianza en sí mismos y sentimientos de ansiedad. Sin embargo, con el apoyo adecuado, cualquiera puede desarrollar la resiliencia.
Es hora de que los empleadores intenten mirar más allá de la tradicional forma de segmentar su fuerza laboral (líneas generacionales o demográficas), e introducir una nueva dimensión del tipo de personalidad.
El apoyo a los empleados ha ido más allá de un enfoque único para todos. Si bien la personalidad es relativamente fija, la resiliencia y las habilidades sociales se pueden desarrollar para ayudar a los empleados y gerentes a prosperar.
Al tener en cuenta la personalidad en las estrategias de su personal, los empleadores pueden adoptar un enfoque mas completo y brindar un apoyo más incisivo para el bienestar físico y mental de las personas, las relaciones y los planes futuros.
Un enfoque de talla única encaja solo por accidente; Comprender los impulsores basados en la personalidad es esencial para llegar a un lugar donde todos puedan prosperar de manera realista en la Era de la Ambigüedad.
Fuente: Adaptación de artículo de estudio: "Thriving in the Age of Ambiguity". Aviva Life & Pensions UK Limited.
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