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Los límites entre el hogar y el trabajo, que alguna vez fueron ciertos, se han vuelto borrosos.




Una investigación llevada a cabo por Aviva Life & Pensions UK Limited, sobre una encuesta a 2.000 empleados, se realizó por primera vez en febrero de 2020 y se repitió en agosto de 2020.


Este estudio destaca las tendencias que han estado surgiendo para los empleados en los últimos años, pero que ahora han alcanzado un punto de inflexión; de entre ellas, las siguientes:




Más de la mitad (52%) está de acuerdo en que los límites entre su vida laboral y familiar se están volviendo cada vez más borrosos, frente al 40% en febrero. La 'nueva normalidad' está ejerciendo presión sobre las relaciones entre empleadores y sus empleados, y los empleados se vuelven no solo físicamente remotos sino cada vez más emocionalmente remotos.




Un 54% está de acuerdo en que su empleador ha trabajado duro para crear un sentido de "unión empresarial", adoptando un diálogo abierto y comunicando acuerdos laborales futuros (60%) y desempeño de la empresa (61%). Sin embargo, los esfuerzos están teniendo un impacto limitado en la moral y la satisfacción tanto en el trabajo como en el hogar. Solo el 15% está de acuerdo en que su empleador se está esforzando por comprender qué los motiva, y un 42% cree en sus objetivos y que estos son claros. A esto lo denominamos "deriva de los empleados". Comprender las motivaciones de los empleados es una oportunidad clave para que los empleadores fortalezcan el compromiso, ya que el aumento del trabajo remoto sigue siendo una realidad para muchos.



El 43% de los empleados describe su bienestar como menos que bueno, y el 84% dice que trabajaría incluso si se sintieran mal. Por el contrario, solo una cuarta parte está de acuerdo en que su empleador está realmente preocupado por su bienestar (26%). La buena salud mental en el trabajo y el buen compromiso de los empleados van de la mano. Existe una sólida evidencia de que los lugares de trabajo con bienestar mental positivo son más productivos, y los empleadores podrían considerar descubrir y abordar las preocupaciones individuales y brindar apoyo personalizado.



En agosto, una cuarta parte (25%) de los empleados sintió que no estaban preparados financieramente para eventos inesperados en el futuro, como enfermedades graves, accidentes o despidos. Una mayor ansiedad ha llevado a los empleados a trabajar más horas y a tomar menos días de licencia, al mismo tiempo que se sienten menos satisfechos con el trabajo y la vida. El "presentismo", en esta nueva forma remota, se ha vuelto más notorio. Además, los límites entre el trabajo y la jubilación se están difuminando y los empleados están cada vez más preocupados por la jubilación: cuánto necesitarán ahorrar, cuándo podrán jubilarse y cómo será su jubilación.



El tipo de personalidad tiene una gran influencia en el comportamiento, mentalidad y resultados personales. Aquellos que se enfrentan mejor a su bienestar mental, estilo de vida, salud y satisfacción laboral, tienden a ser naturalmente más resilientes y optimistas. Aquellos con menos resiliencia emocional experimentan regularmente emociones negativas, baja autoconfianza y sentimientos de ansiedad. Los empleadores podrían intentar mirar más allá de las formas simples de segmentar su fuerza laboral e introducir una nueva dimensión de tipo de personalidad. La personalidad es fija, pero la resiliencia y las habilidades se pueden desarrollar para ayudar a los empleados y gerentes a aprender a aceptar la ambigüedad.


Lo que queda claro de estas cinco tendencias es que la ambigüedad nos ha impactado a todos de manera diferente. Ante la incertidumbre, los empleados están cambiando la prioridad de factores clave en el trabajo y en sus vidas.

Fuente: “Abrazar la era de la ambigüedad - Revitalizando la fuerza laboral en un mundo en rápida evolución”. Aviva Life & Pensions UK Limited.

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