Es un hecho que hoy un 50% de las dotaciones de las empresas chilenas se encuentran compuestas por trabajadores correspondientes a la generación Y, es decir, menores a 34 años de edad. Y también es un hecho, que los elementos que componen los paquetes de compensación y beneficios de la mayor parte de estas empresas, han sido construidos desde una visión tradicional y anquilosada, poco alineada con los tiempos que vivimos.
No existe una única fórmula para diseñar un paquete de Compensación y Beneficios que revista un alto atractivo para los trabajadores de diferentes organizaciones, sectores, y latitudes; sin embargo, sabemos que existen elementos que son transversales desde los grandes números y que pasan, fundamentalmente, por la caracterización y relevancia de las redes sociales - tecnología, la flexibilidad como un anhelo cada día mayor, una familia diferente a la tradicional, y nuevas reglas sociales y laborales, todo lo que configura un panorama nuevo y desafiante, que no puede ser resuelto únicamente vía salario.
¿Pero quién realmente dictamina cuáles son los elementos de Compensación y Beneficios que pueden tener una alta valoración?
En realidad, Todos: la compañía - que cuenta con un presupuesto limitado en función de su realidad financiera, el trabajador que tiene la posibilidad de escoger, y la familia - que se encuentra íntimamente ligada a la compañía vía trabajador - así como a través de eventos en participa directamente.
Si todo esto se hace, la inversión de todos será entendida, agradecida y legitimada.
Cada vez que contratamos a un nuevo trabajador lo que realmente hacemos es construir una relación, en la cual como empresarios tenemos una responsabilidad social superior; probablemente, la misma que nos esforzamos en inspirar en los potenciales trabajadores para adherir a nuestra compañía; por esta misma razón, debemos apoyarlos, motivarlos y empoderarlos, de manera que esta relación permanezca por mucho tiempo y sea igualmente beneficiosa para ambos.
El relacionarnos incluye al razonamiento, la emoción, la acción, comunicación convincente apasionada y creíble. Las personas pueden o no escuchar nuestras palabras, pero las perciben.
El arte de comunicarnos más allá de las palabras, exige que seamos capaces de combinar las palabras justas, la emoción adecuada, la convicción intelectual y la impresión visual correcta. El entablar relaciones con los demás no es algo que ocurra por si solo para lograrlo; debemos tener una real intención de hacerlo, y eso siempre requiere de energía positiva.
Cuando se quiere saber algo, no hay nada que reemplace el preguntarle directamente a nuestros trabajadores, y luego sinceramente, escuchar sus respuestas y no simplemente lo que se queremos oír; existen diferentes maneras de preguntarle cosas a nuestra gente, dependiendo de la información que se quiera obtener. Algunas de estas alternativas incluyen actividades como las siguientes:
Encuestas de evaluación de necesidades,
Grupos Focales,
Entrevistas formales,
Buzón de sugerencias.
Nuestro modelo de trabajo para entender si su actual paquete de Compensación y Beneficios “conversa” realmente con su dotación laboral, lo hemos implementado – con importantes resultados en la práctica, a través de los siguientes procesos de operación:
Diagnóstico de la dotación actual,
Set de actividades – que buscan entender a “boca de jarro” - es decir desde los trabajadores de la compañía, cual es la evaluación que ellos tiene del paquete de compensación total que la compañía actualmente les entrega. Estas actividades, las podemos resumir como:
Encuestas en línea.
Entrevistas personalizadas.
Tabulación y presentación de hallazgos.
Re Alineación de C&B
Cartola de Compensación Total. (Visibilización)
ROI de C&B.